- Pero si tú no tienes ni puta idea.
- Correcto, pero no por eso voy a dejar pasar esta oportunidad para investigar, escribir y hacer que leas algo que a la larga te servirá para que dejes de referirte a España como la madre patria.
- Es que lo es!
- No lo es, y después de leer esto, también dejará de serlo para ti.
Escribiré de casi todo lo que pasó en América, pero la del sur, que la del norte ya sabemos como fue y como está, aunque viéndolo bien, una cosa lleva a la otra, la esclavitud en América no se entiende sin las plagas españolas y portuguesas, y cuando digo plagas me refiero a los españoles y a los portugueses en general, pero, ¿qué hablar de los daneses, ingleses, holandeses y gabachos? esa, querida afición, es otra historia.
La España de la reina Isabel la católica (se ve que lo del incesto le venía de sangre), que consiguió casarse con un primo suyo, gracias a la intervención de un tal Borgia que con el tiempo fue Papa y mira por donde, tenía tal lio en su familia, sus hijos también practicaban el incesto, para ser tan religiosos les iba la marcha, no? Le podríamos preguntar a Lucrecia de Borgia única hija del Papa Alejandro VI, y que fornicó con casi todos sus hermanos, pues sí, el resto de hijos de su padre eran machotes todos. Entre la Reina y el Papa se follaban todo lo que se les presentaba y si tenía un parentesco, mejor. Pues esa Reina tenia un marinero preferido que se llamaba Cristobal Colon.
Bueno, esa España hizo que Cristobal Colon (en adelante Cris, por no escribir tanto, ya saben) fuese uno de los primeros turistas veraniegos a las Indias (así denominaban entonces a la parte sur del continente americano) y aunque llegó a Las Bahamas el 12 de octubre de 1492, salió del puerto de Palos un 3 de agosto, ojo a ese dato.
Pues bien, centremos nuestra atención en el primer viaje de Cris, ya en alta mar se dio cuenta que se había olvidado de subir a unas cuantas churris para que atiendan (sexualmente hablando) a toda la tropa que llevaban en sus barcos, sí, la Niña, la Pinta y Santa María, y fue en este último barco en el que Cris embarcó en la búsqueda de su loca (y muy, mucho) aventura.
Marineros en su mayoría delincuentes, presos, gente de la farándula delictiva, vamos, que vieron como pasaban los días y no habían ni burras para descargar todo ese material genético del cual eran portadores, ese ADN muy españoles, mucho español, que decidieron tirando un maravedís al aire quien sería el conejito para sus juergas carnales y mira por donde, el cura que no era cura (muy listo él) que acompañaba a Cris, viendo la que se venía, apoyó sin mucha dilación dicho sorteo, pero hubo un criminal de nombre Pedro Rodríguez que era muy cachondo (originario de Lepe) dijo lo siguiente, "nos dejamos de sorteos y de hostias y le entramos a sable al almirante", a lo cual la gente interpretó que el cachondo de Rodriguez se refería a descargar toda la furia varonil en el esfínter anal de Cris (desde entonces en Balzar mi pueblo, existe ese término popular de entrar a sable, que es sencillamente hacer el amor).
El resto ya sabéis como acabó, saqueos, violaciones, genocidio, y lo peor de todo es que a día de hoy los libros de historia os cuentan maravillas de Cris, que fue un buen marinero, un buen comandante, un conquistador y en eso estamos de acuerdo, conquistó a todo marinero que se le cruzaba y fue por eso que hizo tres viajes más, muy vicioso por los viajes o por otra cosa, igual que su valedora la reina Isabel cuando se le cruzaba por su camino algún primo de buen ver.
Es por eso amigos y amigas españolazos de buen corazón, que rendís pleitesía a Cris como si fuese un super héroe de las pelis americanas, os digo que os han engañado de siempre, toda vuestra puta vida habéis vivido engañados, habéis admirado a un integrante y puede que al fundador del colectivo gay, sí, no me tiréis piedras todavía, después de un largo y sinuoso estudio hemos comprobado que en realidad el día 12 de octubre es un día del orgullo gay encubierto y no el día de la hispanidad o como se lo conoce en Latinoamérica, "el día de la raza".
Y ahora dejo este mensaje, permitidme el abuso, de dirigirme a mis hermanos americanos de habla castellana, dejen de referirse a España como "la madre patria" es vergonzoso, es deplorable, es lamentable, llamar así a una tierra que no os vio nacer y donde os llaman "panchitos" "sudacas", en fin, a ver si aprendemos de la historia para que tales cosas no se vuelvan a repetir.
Para acabar he de decir o proponer humildemente, que:
1 - Proclamar que el día 12 de octubre de cada año pase de llamarse "día de la hispanidad" a "día del orgullo gay"
2 - Que la cerveza sea patrimonio de la humanidad.
3 - Que el día 25 de diciembre sea conocido como el "día del sable"
"UN DÍA COMO HOY, HACE 528 AÑOS LLEGARON AL SUR DE AMÉRICA CON LA PINTA, LA NIÑA, LA GRIPE, LA SÍFILIS, LA VIRUELA Y LA SANTA MARIA"
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